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Ensenada, B.C.- Este día será interpuesta ante la Sindicatura Municipal una nueva denuncia en contra de elementos de la Dirección de Seguridad Pública Municipal (DSPM) por abuso de autoridad en agravio de una mujer, quien asegura fue sacada de su vivienda el pasado fin de semana por policías municipales, y encerrada alrededor de 20 horas en una celda en la Estación de la Calle 9na y Espinoza, luego de negarse a firmarle a los oficiales una declaración en contra de un presunto narcomenudista, que opera en la zona centro.
La afectada es María Vianney Chávez López de aproximadamente 32 años de edad, quien vive en una zona de departamentos ubicados en la Calle Tercera, en la zona centro de Ensenada, cerca de la Clínica 32 del IMSS. Chávez, comentó en entrevista con plex, que a finales de enero del 2015 ya había sido abordada por policías municipales, quienes entonces ingresaron a su vivienda buscando droga, y le pidieron que los apoyara firmando una acusación en contra de uno de sus vecinos, señalándolo como narcomenudista, para que así pudieran detenerlo y de paso dejarla en paz.
Chávez asegura haberse negado, y recibir como respuesta por parte de un oficial de apellido Robinson, que volverían a visitarla.
El pasado fin de semana, la noche del sábado 7 de febrero del 2015, explicó la afectada, el oficial que identifica como Robinson, acompañado de otros dos presuntos agentes, uno de ellos mujer, y todos vestidos de civil, acudieron nuevamente a su vivienda, donde se encontraba acompañada de una mujer que estaba de visita y que sería posteriormente detenida junto con ella por los policías, y ambas trasladadas a la comandancia de la Calle 9.
Indicó, que el argumento dado en el parte policíaco mostrado al juez en turno por los oficiales que las esposaron y trasladaron a la comandancia, fue que se encontraban alterando el orden en la vía pública, aún cuando ambas fueron abordadas al interior del departamento en el que vive María Vianney.
A la mujer que estaba de visita en su casa, la liberaron la misma noche del sábado, pero a ella no.
El juez en turno, sin dar mayores explicaciones le dijo que tendría que dormir en las celdas y no sería liberada sino hasta cerca de las 5 de la tarde del día siguiente. “Unas celdas en las que no te puedes ni sentar, que huelen muy mal, no puedes ni ir al baño porque las celdas de hombres y mujeres están juntas y se ve todo ahí, te tiene que hacer casita o taparte otra mujer para que no te vean los hombres si quieres ir al baño que está ahi a la vista”, agregó.
¿Y cuál fue el argumento del juez?, se le preguntó.
“No se, nada más me dijo que tendría que pasar la noche ahí, y no me fijo ni fianza ni nada, y ahí me la pase, parada toda la noche […] luego pasó uno de los policías de los mismos que andan con el Robinson, y me dijo ‘¿entonces qué lista pa’hablar?’, y yo me enojé mucho”, explicó.
Y es que para María Vianney, la presión ejercida por los policías para obligarla a firmar una declaración, que ni siquiera sabía qué decía, salvo de que acusaría a su vecino por vender droga, está fuera de lugar. “¡No es la forma!, y me han afectado, a mi, a mi persona están afectando y no me justificaron la detención, hasta me dijeron que si les hacía el paro me daban 6 meses de tolerancia para que yo misma ‘le diera vuelta’ a lo que le sacaran al vecino, así con esas palabras, y yo les dije, oye no todos somos así, sí, era desmadrosa de joven pero yo no hago esas cosas”, señaló.
Por ese motivo, decidió entablar una denuncia formal en contra de los policías municipales ante Sindicatura Municipal, para dejar en claro que ha estado siendo hostigada, y que teme le sea plantada droga o se le invente algún delito por parte de malos elementos. Asimismo, posterior a la denuncia en Sindicatura Municipal, realizará una denuncia de los hechos ante la Procuraduría de los Derechos Humanos de Baja California. Y adelantó, que habrá otros testimonios que respaldarán sus declaraciones.
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