Opinión

¿Juego o iniciación criminal? [Opinión: Elvira Luna]

[topswf swf=’http://www.plexmx.info/wp-content/uploads/2015/05/banner-640-x-90.swf’ width=’640′ height=’90’]

Fotografía: eric molina / cc

Fotografía: eric molina / cc

[Opinión]

“¿Juego o iniciación criminal?”

foto ELP

Por: Elvira Luna Pineda.
La autora de esta columna es Abogada, Vicepresidenta Nacional de la Academia de Género de la Confederación de Colegios y Asociaciones de Abogados de México, A.C.

 

 

 

Cualquier terror en la ficción está siendo superado por nuestra sociedad actual.

Los hechos violentos que diariamente dan cuenta los medios de comunicación, algunos más sanguinarios que otros, seguramente ninguno de nosotros nos enteramos, en primer lugar porque terminaríamos enfermos de leer tanta maldad, segundo porque no tenemos tiempo de leer tanta noticia desagradable y tercero simplemente por salud mental.

Sin embargo hay hechos que trastornan la cotidianidad –violenta por cierto- de nuestras comunidades. Es el caso del terrible asesinato de un niño de sólo seis años en Chihuahua. Sus asesinos, según dicen “jugaban al secuestro”, no lo creo. Veamos porque.

De acuerdo con referencias de distintos medios de comunicación Chistopher Raymundo era un niño de seis años de edad. De manera frecuente deambulaba por las calles de la colonia donde vivía pidiendo comida para alimentarse él y a sus hermanos, empujaba un carrito en el que trasladaba a uno de sus hermanos, quien tiene una discapacidad que le impide moverse por sí solo.

Sus vecinos, algunos de ellos incluso emparentados con su padre, dos mujeres de 13 años, dos hombres de 15 y uno más de 11 años de edad. Eran el terror de la colonia. Incendiaban casas, mataban animales, apedreaban casas, robaban, entre otras tantas conductas que por sí solas debieron llamar la atención de los adultos.

La comunidad donde vivían y sucedieron los hechos, es la colonia Laderas de San Guillermo, al margen oriente de la ciudad de Chihuahua, en el municipio conurbado de Aquiles Serdán. El entorno e historia social de esta comunidad está inmerso en la venta de drogas al menudeo, ejecuciones callejeras, casas abandonadas que sirven como picaderos, refugio de reos que son liberados y se quedan a vivir en esta parte de la ciudad, ya que la cárcel o Centro de Readaptación Social colinda con la colonia.

A uno de estos cinco menores de edad se le ocurrió “jugar al secuestro”, para lo cual requerían una víctima. Inmediatamente pensaron en Chisthoper Raymundo de seis años, a quien llamaron para participar en esta acción que le arrebato la vida. ¿Cómo pensar que jugaban? ¿Cómo creer que las autoridades de Chihuahua se quedaran con esa versión? Si la información da cuenta de un crimen planeado minuciosamente por un grupo de personas menores de edad.

Plan que ejecutaron a sangre fría torturando al niño y asesinándolo, para posteriormente cavar un hoyo en un lote baldío, enterrarlo, taparlo y colocar encima el cadáver de un perro que también asesinaron. Esto con la finalidad de que el olor fétido del cadáver del animal distrajera la atención del cuerpo del niño enterrado. Ellos mismos, participaron en las acciones de búsqueda cuando la familia y las autoridades activaron las alertas por su desaparición.

No acepto el dicho del juego. Fue un plan real, grupal, llevado a cabo con una gran dosis de perversidad y sangre fría. Es de todos sabido que acciones como estás son utilizadas e inducidas como prácticas de iniciación criminal. ¿Tendrá ya la autoridad una línea de investigación en este sentido?.

Podemos desbocar toda la furia colectiva contra estos cinco adolescentes que asesinaron a Chisthoper, sin embargo también me pregunto: Si la niñez aprende del ejemplo ¿Qué están viendo los niños, las niñas y los adolescentes en México que están superando cualquier historia de terror? ¿Quiénes son la familia de estos muchachos y jovencitas? ¿Cuáles eran sus dinámicas familiares que los llevaron a planear y ejecutar este crimen? Como sociedad ¿Qué estamos haciendo? Guetos, en los cuales se margina y excluye a personas de grupos sociales menos favorecidos, ¿esperando que? Que un día se perpetren crímenes como este para coléricamente exigir que se haga algo. ¿Cómo gobiernos? No creo tampoco que ignoren estas realidades de las colonias marginadas no sólo de Chihuahua, sino de todo el país.

Aquí mismo en Baja California se da cuenta de pandillas lideradas por adolescentes, incluso por mujeres menores de edad y, ¿Qué pasa? Nada. Pareciera que solo las cuentan, que la información sólo sirviera para enumerarlas y no para el establecimiento de una política social que inhiba el crecimiento de vidas en el subsuelo.

Políticas criminales que no sólo tengan efectos punitivos, sino que contemplen la prevención como el bastión de los esfuerzos y presupuestos. Este caso nos debe de llevar no sólo al asombro, a la exigencia, a la cólera del colectivo social, sino a evaluar en forma real las dinámicas sociales y familiares que hoy por hoy están generando criminales menores de edad. Esto es fuerte, y fuerte debe ser la reacción que genere. Para la reflexión comparto con ustedes la cita de Karl A. Menninge: “Lo que se les dé a los niños, los niños darán a la sociedad”.

http://elviraluna.blogspot.mx/
Twitter: @mujeporlapaz
https://www.facebook.com/CentroIntegralparalaMujer

[AdSense-A]


** Los comentarios vertidos en los post bajo la categoría “Opinión”, son responsabilidad exclusiva de su autor. Sistema informativo plex, funge en estos casos, exclusivamente, como espacio abierto para la expresión.

Categories: Opinión

Tagged as:

Canal de noticias de plex en Youtube: