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A la derecha, José Antonio Castillo González, asesinado la madrugada del domingo 2 de agosto del 2015 en Ensenada.
Fotografía: Jorge Gómez / plex
Ensenada, B.C.- Demasiado trabajo y poco personal es la justificación que había estado recibiendo Ana Elizabeth González Morales y su familia, por parte de funcionarios de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE), luego de que había pasado casi un mes y el caso del homicidio de su hijo, José Antonio Castillo González, no había sido enviado a un juzgado, ni les reportaban los avances del proceso.
El asesinato de Castillo ocurrió durante una riña campal en una “tocada” en Valle Dorado, entre la noche del sábado 1 y la madrugada del domingo 2 de agosto del 2015. Hubo múltiples testigos del incidente y a los agentes ministeriales les fueron proporcionadas esa misma noche diversas evidencias documentales que van desde fotografías hasta videos, según explicó la familia del joven. Sin embargo, al 27 de agosto los familiares no tenían novedades respecto a si alguna persona había sido detenida y/o siendo procesada como presunto responsable de la agresión. De hecho, ni siquiera les había sido informado si el tema estaba en algún juzgado o no.
González Morales, en entrevista con plex la tarde del 27 de agosto, destacó el tener que estar “correteando” a los agentes para que le reporten los avances del caso, de que no le dicen nada si no pregunta, y el tener que escuchar a los propios ministeriales señalar por las vías no formales, que traen muchos casos a la vez y por ello la falta de tiempo.
Veladoras y objetos del joven que permanecen como recuerdo para sus familiares.
Fotografía: Jorge Gómez / plex
Desesperados acudieron esa misma semana a la Procuraduría de los Derechos Humanos de Baja California, a interponer una queja por el retraso en la localización y detención de los homicidas, quienes sin una orden de aprehensión, tuvieron tiempo suficiente de darse a la fuga a cualquier sitio. A pesar de las declaraciones y señalamientos de los involucrados que les fueron hechas a los agentes la madrugada del domingo.
Dos días después del homicidio, el subprocurador de zona Ensenada de la PGJE, Marco Antonio Chavarría López, reportaba seguir armando el caso. En declaraciones a medios de comunicación, el funcionario no hizo referencia a haber realizado algún operativo especial de localización, más allá de monitorear las redes sociales y de tener “una idea” de quiénes pudieron haber sido los agresores, por lo que dijeron los testigos.
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Castillo, apenas cumplía la mayoría de edad el día que fue asesinado. Su expediente quedó registrado bajo el número 1641-15-300-AP. Murió tras ser apuñalado en el corazón, durante la riña que se originó, según testimonios, luego de que a uno de los que serían los agresores del joven, le tiraron su botella de cerveza “caguama” y comenzaron a pelear. Choque hipovolémico debido a laceración cardíaca por herida penetrante de tórax por arma punzo cortante, fue la causa de muerte oficial.
En el incidente también resultaron heridas otras personas, incluyendo Carlos Arturo Hernández González de 22 años de edad, con herida en su flanco derecho y mano izquierda, tras ser agredido con un arma punzocortante.
La madre de José Antonio Castillo González, sostiene fotografías y amuletos colocados en su recuerdo en la sala de su vivienda. Fotografía: Jorge Gómez / plex
La familia del joven comentó que antes de ser apuñalado, al José Antonio lo inmobilizaron con una pistola eléctrica y posteriormente lo agredieron con una navaja. Agregaron que durante la riña, otras personas también fueron atacadas por el sujeto con la pistola eléctrica, el mismo que inmobilizó a Castillo, algunos de ellos terminaron convulsionándose en el piso, explicaron.
Al día siguiente de la entrevista que sostuvimos con la familia de José Antonio, la PGJE citó a la madre del joven, para informarles que ya habían enviado el caso al Juzgado Segundo de lo Penal, para que fuese posteriormente librada una orden de aprehensión en contra del, o de los agresores.
El expediente, según la Procuraduría, fue enviado al Juez el 26 de agosto del 2015, por del delito de homicidio en riña.
Ana Elizabeth González comentó que su familia se sentía desesperada al no tener razón de las investigaciones, percibieron un lento avance en el caso de su hijo. Derivado de la tardanza los familiares de José Antonio comenzaron a preguntarse si acaso había dinero de por medio entregado a los ministeriales. ¿o cuál era el motivo?.
“Lo único que nosotros pensamos de que pues aquí hay dinero de por medio. Si desde la hora y momento que pasó lo que pasó, se les dio todo en las manos. Se les dio video, los testigos fueron a atestiguar en el momento. Fotos, direcciones, todo se les dio. Entonces, ¿por qué no han actuado?”, preguntaba la madre del joven.
Cuatro personas fueron los involucrados, apuntó. “La muchacha que traía el carro (en el que se darían a la fuga de la fiesta los agresores); el novio de la muchacha; supuestamente el asesino; y el otro que le dio los toques a mi hijo”, indicó.
#JusticiaParaTOCKS reza el slogan utilizado por los familiares en redes sociales.
Fotografía: Jorge Gómez / plex
Categories: noticias
